El gigante de la comida rápida Burger King lanzó en septiembre su propio vino. Podría parecer una broma de mal gusto, pero no lo es.
Whopper Wine se comercializará exclusivamente en España, para celebrar el 40º aniversario de su presencia en el país, y sólo habrá 40 botellas. Los interesados se han apuntado a un sorteo para ganar una botella de Whopper Wine, el cual declaran que se ha fabricado para casar a la perfección con la línea Whopper de BK.
El Whopper Wine se ha envejecido en barriles tratados «a la parrilla», al igual que la carne, y viene embotellado con un diseño propio, por si tener vino de Burger King no fuera suficientemente atractivo.
El anuncio tuvo un impacto relativamente débil en los medios sociales, teniendo en cuenta la magnitud de la marca Burger King y a pesar de que su vídeo sobre Whopper Wine obtuvo un millón de visualizaciones. No obstante, en cuanto al impacto social en España, los medios sociales apuntan una cobertura de los medios desproporcionada del 6 de octubre, cincuenta veces mayor, cuando las menciones sobre Whopper Wine alcanzaron su clímax.
Parece que se trata de un lanzamiento poco efectivo en los medios sociales, pues muy pocas personas se unieron a la noticia con publicaciones propias; Whopper Wine se mencionó sólo en 462 clippings, pese a que llegó a 24 millones de personas sólo en Twitter.
Esta no es la primera vez que BK va más allá de las hamburguesas y las patatas fritas; en abril de este año, las franquicias japonesas lanzaron un perfume Whopper. A saber por qué, pero ahí está.